"El pueblo de Córdoba, en homenaje a la Policía Local y a quienes dejaron su vida en el servicio. Como muestra de reconocimiento y gratitud por velar por la ciudadanía haciendo que sea posible que cada uno de los rincones de Córdoba sea un lugar de encuentro y de diálogo". En definitiva, una ciudad segura para sus habitantes.
Así reza el lema del nuevo monolito que se ha descubierto esta tarde en la ciudad en conmemoración de la creación del cuerpo de la Policía Local, en una iniciativa que como el propio jefe de la policía Local, Antonio Serrano, ha desvelado, se ha llevado a cabo por iniciativa popular, y merced a ello sus agentes ya cuentan, por fin, con un lugar de reconocimiento a su labor, además del monolito en memoria de las asesinadas María de los Ángeles García García y María Soledad Muñoz Navarro junto al aparcamiento de La Merced.
El monolito, que se ha encargado de descubrir la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), se ha instalado en uno de los bordes de la glorieta de Llanos del Pretorio, justo enfrente del conjunto escultórico de Seneca y Nerón, y va a servir para conmemorar a un cuerpo que lleva en acto de servicio por la ciudad 150 años.
Y es que, según Serrano, se tienen registros de su existencia desde 1844, durante el reinado de Isabel II, cuando se creó la Policía Administrativa y de Seguridad en las principales ciudades de España, como complemento a la la Guarda Civil del Duque de Ahumada. "Se tienen noticias de este cuerpo intervino en diversos actos, como corridas de toros en 1846 o en la Feria de la Fuensanta, en 1847", ha explicado.
Se ha querido hacer este acto coincidiendo con el 22 aniversario del asesinato de las dos agentes del cuerpo tras un atraco en 1996 "para honrarlas, que sirva de estímulo a todos nosotros y como reconociendo a su memoria", ha añadido el jefe de la policía Local.
Por su parte, la regidora ha destacado el valor de ambas mujeres fallecidas en acto de servicio, "defendiendo un concepto tan amplio y necesario como es el de la seguridad en la ciudad". Según Ambrosio, ese suceso de hace 22 años ha sido con diferencia "uno de los actos más terribles que ha sufrido la Policía Local en la capital" y se ha querido reconocer el trabajo y la profesionalidad de ambas, además de reconocer "en el día a día a un cuerpo como la Policía Local, cuyos agentes forman parte natural del paisaje de esta ciudad y que hasta la fecha no contaban con un lugar que sirviera para demostrarles el cariño, el respeto y el reconocimiento de toda una ciudad al trabajo que desarrollan a diario".
